El campo que nos duele

El 10 de diciembre, en el cumpleaños de uyn cuarto de siglo en Democracia, los productores rurales volvieron a manifestarse en las rutas.
Hobo movilizaciones y asambleas en 40 puntos del país, pero en Oliva y en uno de los accesos a Córdoba capital se realizaron cortes del tránsito vehicular.
El planteo de los hombres de campo, siempre hablando de los pequeños que rodean a nuestra región es la baja rentabilidad o en su defecto el "trabajo a pérdida" y la falta de políticas claras. Esta historia comienza a agudizarse desde hace un año, cuando los "gringos" levantaron la cosecha de trigo y el Gobierno nacional cambió las reglas de juego. Con el verso de la anti sojización, siguió confiscando. Pero duele además que al reclamo real de los productores más chicos, que se prendan en esta los especuladores de sie4mpre. Los que avanzan con sus mentiras y su llanto (una característica de los más pudientes, porque el pequeño sabe relajarse, reirse y vivir, sobre todo vivir y sobrevivir con lo que da el campo). Estos señores no dan el brazo a torcer y están dispuestos a guardarse la concreta renta extraordinaria que no quieren ceder. A ocultar bajo el colchón el dinero que frena la agroindustria, que hace de pared al sostenimiento de las fuentes de trabajo en la construcción, al circuito económico que hace a la vida social donde nos movemos. Estos señores, aportan a la crisis, acompañan la propia crisis por la que culpan a los K y rompen en definitiva esa cadena de pagos que sostiene las esperanzas y loas expectativas de todos los trabajadores por una mejor calidad de vida. Ese campo nos duele tanto como el del marginado pequeño productor.

Villa Nueva: Circo de la integración

La Escuela Pablo VI es especial. Por muchas cosas. En el tercer año del Circo de la Vida, sumó talentos a su proyecto con pista de integración: contó con la participación del IDA e IMDA de Villa María y el jardín municipal Justo Páez Molina de Villa Nueva, y se desarrolló en el nuevo edificio de la escuela.

Por la misma vacuna, la misma Constitución, porque se respeten sus derechos, todos cantaron al final de la función 2008. Pero desde el comienzo demostraron más que un deseo. "Los Malabritas" ganaron la pista del Circo de la Vida para mostrarse, junto a los chicos del jardín maternal municipal "Justo Páez Molina" y a los alumnos del Instituto de Discapacitados Auditivos (IDA), y del jardín de infantes del Instituto Municipal de Discapacitados Auditivos (IMDA), de Villa María.

El espectáculo circense se inició con todos los protagonistas en el centro de la escena, en el salón de usos múltiples del merecido nuevo edificio de la escuela "Pablo VI", colmado por niños de centros educativos villanovenses, padres y amigos de la institución anfitriona, cuando el ritmo de "Había una vez un circo"... se hizo verbo.

Los aplausos no tardaron en ganar el auditorio y cada uno pasó a ocupar su lugar, para que los más pequeños del jardín "Justo Páez Molina" y del Nivel Inicial de la "Pablo VI" mostraran sus destrezas haciendo monadas y tomando el juego como integrador social, porque esa es la consigna.

La música y el baile llegó con Florencia, Ana Laura, Tamara y Tamara, con "Amigos del corazón", aunque expresándose como divinas.Luego, los auténticos malabritas posaron en la pista y demostraron avances de sus habilidades, basados en significativos esfuerzos que el circo lo hace visible.

Y de la cultura villanovense aparecieron en acción los jinetes de segundo y tercer grado, para poner de manifiesto sus destrezas tales como saltos, galopes, carreras y juego con sogas.Los estudiantes del Profesorado de Educación Física "Gabriela Mistral", importantes colaboradores en este proyecto, se encargaron en el intervalo de hacer participar a docentes de otras instituciones y padres, además del intendente villanovense Guillermo Cavagnero.

La edición del espectáculo denominado esta vez "Sumando Talentos. Los Malabritas" tendrá por siempre la marca de los vistantes, una marca similar a la de los anfitriones. Alumnos de la Escuela Pablo VI, del IDA e IMDA y del jardincito municipal se unieron para cantar a viva voz y con lenguaje de señas "Derechos. Derechos". Y la melodía llegó a todos los que participaron del circo, de su mensaje, de su juego, de su fiesta.

Desde la mística

Nota publicada en el Suplemento Político de EL DIARIO del Centro del País

Desde la mística

Franco Gazzoli, compañero de EL DIARIO y dirigente del Cispren, estuvo en Jujuy. Vivió la Constituyente Social junto a otros 500 cordobeses, y más de cien de nuestra región

Las mujeres de la Cooperativa Textil abandonaron su puesto de trabajo para dar lugar a que se alojen compañeros que llegaron desde los más diversos puntos del país. Es pasado el mediodía en un cerro jujeño sembrado de casas y emprendimientos. Es Alto Comedero, de la organización barrial Tupac Amaru, de la CTA.

De los colectivos bajaron los miles de militantes asombrados por el paisaje de tantas cosas realizadas. Un predio deportivo y la pileta con sus quinchos se alzan en el espacio, a metros de los Centros de Integración Comunitaria, resplandecientes, coloridos. Nadie sale del asombro y soporta el sol del mediodía para contemplar lo que la Tupac transmite.

Tras alojarse, los puestos de vendedores ambulantes ofrecieron el almuerzo necesario para enfrentar dos días a pleno, pensando en la construcción de un país más justo.Los tupaqueros fueron los primeros en el desfile de las delegaciones de las 23 provincias y Capital Federal. Qué somos y qué queremos. La tienen clara y lo manifestaron: salud, trabajo y educación. Con el puño en alto gritaron. Todos gritaron a pedido del motorizador de esta Constituyente Social, Víctor De Genaro: "Vamos por más, porque no nos conformamos con lo que tenemos, porque es necesario erradicar el hambre, y para ello es más que necesaria una mejor distribución de la riqueza".

La consigna se instaló en el aire jujeño. En plena organización del desfile, Milagros Salas tomó el micrófono para mover a la “tropa”. De un lado a otro, la mujer se carga la causa al hombro.Al paso de cada formación las bandas no pararon de sonar canciones alegres. La revolución es alegría y se respira en las alturas de Jujuy.

Los cánticos abrazaron a cada uno de nosotros. La columna tupaquera siguió marchando, demostrando su poder popular. Una pancarta conmovió: más de 75 mil chicos asisten a las 800 copas de leche en toda la provincia. La organización cubre huecos que otros ignoran.La decimoquinta formación fue la de los cordobeses, integrada por 500 compañeros, un centenar de ellos de Villa María y de Villa Nueva. José Goroso, de ATE-CTA se encargó de mencionar a cada una de las entidades.

La movilización terminó con ceremonia de los pueblos originarios y con cánticos de los uniformados tupaqueros. En el palco, Claudio Lozano me respondió como al pasar que quizás no estemos todos pero somos muchos y no oculta su satisfacción. El diputado llegó en la columna junto a las madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, y los tupaqueros también los abrazaron con cánticos.

"Mucho por hacer"

En la mañana del sábado grandes grupos recorrieron buena parte del sector céntrico y parques de San Salvador para participar de las 20 comisiones.Un importante grupo de la delegación villamariense lo hizo en la que encabezó Lozano. El hombre de proyecto Sur fue el encargado de abrir el debate. “Esta es una nueva estación, no comienza hoy ni termina hoy”, dijo sobre la Constituyente.

Y el debate comenzó. Cada comisión tuvo más de 50 alocuciones. Todos aportaron, todos apostaron al cambio.“Espero que se vayan sorprendidos de lo mucho que se puede hacer con la lucha”, resumió Sandra en una de las reuniones que se realizó en la sede central de la organización, en pleno corazón de San Salvador de Jujuy.

Una increíble sensación invadió a cada uno de los participantes, nos nutrió de la alegría necesaria para el cambio y para encarar en esta región un trabajo que buscará movilizar al conjunto de las entidades sociales. Los participantes, los compañeros que se llegaron a Jujuy tienen en claro que hay mucho por hacer, se entusiasman y ya piensan en las acciones futuras.“No hay que tener miedo”, dicen los tupaqueros. Y los tupaqueros, realmente empujan.


http://www.eldiariocba.com.ar/noticias/nota.asp?nid=4092

Las imágenes de Evita y el Che custodiando a Tupac se repiten a lo largo del sueño jujeño.

Madres de la Plaza, el pueblo las abraza

Por un país más justo

Con las consignas de la Constituyente Social como propias, los tupaqueros levantan sus brazos y emprenden cada día el camino de la lucha, porque saben todo lo que se puede hacer. ¡Vamos por más!

Marcha de la alegría

La Constituyente Social avanza bajando de los cerros jujeños con la música de las bandas de la Tupac Amaru. El sonido alegre y los cánticos de poder popular embisten contra cualquier pesimista y arrastra a todos en pos de un país mejor.
Los tupaqueros ratifican puño en alto que la revolución es alegría, y marchan sin cesar porque saben que resta mucho por hacer, que tendrán cada día más obstáculos, pero básicamente, no tienen miedo y entusiasman a quien se les acerca.